Con el paso del tiempo, las personas y en especial las mujeres, suelen experimentar una pérdida de masa ósea de su cuerpo y también a nivel muscular.
La pérdida de masa ósea en los huesos es lo que llamamos osteoporosis. Esta enfermedad consiste en un debilitamiento de los huesos aumentando la posibilidad de que estos se puedan fracturar o quebrar. Es un proceso silencioso debido a que dicha pérdida se produce sin que la persona afectada se de cuenta de ello.
La osteoporosis es un proceso silencioso que se produce sin que la persona afectada se de cuenta de ello.
Por un período determinado, el cuerpo está en constante absorción de hueso viejo y suele producir hueso nuevo. Diversos especialistas sostienen que el esqueleto humano suele remplazarse completamente en un tiempo aproximado de 10 años. Sin embargo, a la edad de 30 años el organismo empieza a perder la capacidad que posee para generar la masa ósea necesaria para reponer aquella que el cuerpo reabsorbe de manera natural. Este es un proceso que se conoce como “renovación ósea”.
La osteoporosis consiste en un debilitamiento de los huesos aumentando la posibilidad de que estos se puedan fracturar o quebrar.
Dicho de otra manera, entre los 20 y los 25 años el cuerpo logra alcanzar un punto máximo de masa ósea, pero a partir de ese momento empieza a disminuir y con la entrada de la menopausia, las mujeres empiezan a perder masa ósea de una manera más rápida.
Síntomas de la osteoporosis
La osteoporosis se caracteriza por ser una enfermedad silenciosa, no suele presentar síntomas que le indiquen a la mujer (o el hombre) qué es lo que está ocurriendo.
Sin embargo, teniendo en cuenta la edad y el conocimiento del organismo, hay síntomas generales que pudiesen indicar que existe un alto riesgo de sufrir de esta enfermedad, como son:
- Dolor en la espalda, debido a la fractura o el colapso de una vértebra.
- Pérdida de estatura con el paso del tiempo.
- Postura encorvada.
- Fracturas de huesos con mucha facilidad.
Factores de riesgo de la osteoporosis
Existen condiciones en el cuerpo humano que podrían influir para que se presente la enfermedad de una manera natural. Elementos externos o internos que podrían convertirse en potenciadores de la misma.
Lo primero que se debe tener en cuenta es que el principal factor está relacionado con el sexo. Las mujeres tienen más riesgo de sufrir osteoporosis que los hombres en una condición clínica y normal, y comprobado por diversos estudios.
Por otro lado, se debe tener en cuenta la edad. Las mujeres con edad avanzada y pasada la menopausia son más propensas a sufrir osteoporosis. Esto es debido a que los estrogenos que producen los ovarios durante la época fértil de la mujer, activan los osteoblastos que son las células encargadas de la formación ósea. En la menopausia, este estimulo desaparece y por lo tanto predomina las destrucción del hueso frente a la formación del mismo.
La raza es otro de los factores de riesgo importantes. De acuerdo con diversos estudios médicos las mujeres de raza blanca o asiática son más propensas a sufrir esta enfermedad.
La osteoporosis podría tener un componente hereditario o estar relacionada con los antecedentes familiares. Si alguno de tus padres o cualquier familiar sufrió de osteoporosis, es probable que también la puedas tener.
El tamaño del cuerpo también es importante. Por lo general, los hombres y las mujeres de pequeña estatura presentan mayor riesgo debido a que tienen menos masa ósea.
Existen otros factores a tener en cuenta que tienen que ver con las hormonas. Los niveles bajos de hormonas sexuales suelen debilitar los huesos. Asimismo, los problemas de tiroides y glandulares a nivel de glándulas paratirina y suprarrenales.
El tomar ciertos medicamentos como los corticoides o el tabaco también favorecen la descalcificación del hueso.
La nutrición también puede ser considerado como otro factor de riesgo. Una dieta baja en calcio disminuye la masa ósea. También afecta y permite la aparición de la osteoporosis los trastornos alimenticios y la cirugía gastrointestinal.
Cómo prevenir la osteoporosis
Principalmente, con una buena alimentación y una práctica de ejercicios físicos constantes y un estilo de vida saludables, permitirán contar con huesos fuertes para toda la vida. El caminar al aire libre, es el mejor ejercicio para la prevención de la osteoporosis.
Una buena alimentación y una práctica de ejercicios físicos constantes y un estilo de vida saludables, permitirán contar con huesos fuertes para toda la vida
Por otro lado, se debe tener en cuenta que la alimentación es un aspecto fundamental para el mantenimiento de los huesos. En este sentido se recomienda consumir mucha proteína. Aquellas personas que son vegetarianas pueden encontrar fuentes proteicas en los granos de soja, frutos secos y otras legumbres.
También es recomendable consumir calcio. Los hombres y mujeres entre 18 y 50 años deben consumir por lo menos 1000 miligramos de calcio al día. Una buena fuente de calcio pueden ser los productos lácteos con bajo contenido de grasa y enriquecidos con calcio, vegetales de hojas verdes oscuras, salmón o sardinas, entre otros. Hay que tener en cuenta que para que se absorva el calcio de manera correcta, es imprescindible tener niveles adecuados de Vitamina D. Por lo tanto es muy importante que tomemos el sol sin protectores solares, al menos diez minutos al día en horarios adecuados, o que tomemos suplementos de Vitamina D.
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